lunes, 4 de enero de 2010

A TU MERCED















Nadie duda que los principales activos políticos de Mercedes Araoz son su afán promotor y su gran carisma, sin embargo se necesita más que eso para dirigir con relativo éxito un cartera tan pesada como la de economía y finanzas públicas. Sin embargo, desde este blog, acomedidos fans de su belleza incontestable hacemos votos porque dé la talla.
Reproducimos interesante nota aparecida en la última edición de la revista Caretas acerca de ciertos tópicos tributarios que nos interesan y que la novísima ministra tendrá que afrontar.
Pero de saque mostró una importante diferencia de opinión con su rápidamente reemplazado predecesor, Luis Carranza. Y tiene que ver con la razón que motivó la renuncia de éste: la norma que exonera de impuestos a las PYMES e industrias que se constituyan por encima de los 2,500 y 3,200 metros de altura, respectivamente.
Entrevistada por Mariella Balbi en El Comercio, Aráoz reconoció que no son buenas las “exoneraciones genéricas, abiertas, sin establecer actividades productivas. Pero este es un subsidio al desarrollo en lugares donde no hay carreteras, no hay nada. No es para la capital del departamento”.
En el mismo sentido salió al frente el presidente Alan García, que el lunes 28 respondió a las críticas. “Entonces dicen unos y respondo a las objeciones: va a perforar los ingresos del Estado, cuál ingreso, zonzo, si no hay ninguna fábrica. Si hubiera una fábrica yo le digo: te exonero de impuestos, estoy recortando los impuestos que ya están recibiendo. Si no hay, entonces qué perforo, qué deja de recibir el Estado. El Estado no recibe nada de nada. Yo prefiero que reciba poco pero que además genere empleo y revolucione la sierra porque si no, no va a salir de su atraso”. Fiel a su estilo, añadió que “Esta es la lógica del amargado que se deja llevar por sus tristezas y frustraciones personales... de aquellos que solo critican y buscan titulares periodísticos”.
Hay quienes veían en los pergaminos de Carranza la disciplina de un nerd pero, aunque sea discreto y no ofrezca casi declaraciones, es improbable que se cuente entre los zonzos. El costo fiscal sería efectivamente nulo si las exoneraciones se limitaran al Impuesto a la Renta. Lo que no genera renta, no paga renta. Ese es el esquema vigente en la Selva actualmente. Pero el Congreso lo amplió al IGV y otros impuestos indirectos. En el MEF de Carranza se considera que las exoneraciones geográficas son de muy difícil fiscalización, sea en Canadá, Brasil y la Cochinchina.
Por ejemplo, el régimen exonera el pago para la importación de maquinaria. Es grande la tentación de establecer una sucursal en San Mateo, en las puertas de Lima, sobre la cota de 3,200 metros, y “alquilar” el equipo en la Avenida Argentina.
Los técnicos temen que desmontar el régimen de exoneraciones altoandinas al cabo de los diez años de plazo constituirá una tarea de órdago. La representación parlamentaria andina es mucho más numerosa que la selvática. Las exoneraciones en esta última región pudieron ser desmontadas a cambio de recursos financieros adicionales y luego de persuadir a una bancada diminuta.
A Carranza le debieron saber a sebo las declaraciones que AGP hizo en un colegio en Jauja el viernes 18 de diciembre, cuando anunció la promulgación de la ley y pidió recordar ese día “como el fin de la esclavitud tributaria”. Al día siguiente la norma que materializaba una promesa de campaña del Presidente apareció promulgada en el diario oficial El Peruano, sin que hubiera sido consultada con Carranza.
Hay opiniones distintas. Gastón Benza Flücker, presidente de Sierra Exportadora, dijo a CARETAS que “antes de que la ley entrara en vigencia, el empresariado se resistía a colocar una empresa por arriba de los 2,500 metros debido a que tenía que correr con el gasto de los sistemas de agua y desagüe, energía eléctrica y en algunos casos pistas”. Agrega que “ahora lo que el empresario ahorre en impuestos podrá ser invertido en servicios que beneficiarán a los poblados que en algunos casos no tienen ni electricidad”.
El lunes 28 García se reunió en Palacio con 60 alcaldes de las zonas altoandinas, 22 representantes de cámaras de comercio y 80 empleados. Allí anticipó que la Ley cambiará el panorama actual, en donde solo el 3% de la manufactura nacional se encuentra en la Sierra y solamente existe una fábrica de enlatados de trucha sobre los 2,500 msnm. Colombia tiene 8 zonas libre de impuesto desde hace 20 años y, según Benza Flücker, “todo el desarrollo textil de ese país está basado en una ley parecida”.
El cambio de posta en el MEF fue tan repentino que la transición formal de cargos entre Carranza y Aráoz programada para este lunes 28 fue postergada hasta enero próximo, para dar tiempo a la administración saliente de preparar los informes y balances pertinentes. Lo cual no significa que Meche se encuentre en la inercia de las fiestas de fin de año. Por el contrario, el lunes la flamante ministra de Economía retomó las reuniones, interrumpidas por las fiestas navideñas, con el equipo técnico del MEF.